Las reuniones de A.A. se hacen en una variedad de formatos y cada reunión adquiere características típicas de su localidad. En la mayoría de las reuniones escuchará a los miembros hablar sobre lo que la bebida les hizo a ellos y a las personas a su alrededor. La mayoría también comparte qué medidas tomaron para dejar de beber y cómo viven la vida el día de hoy.
El propósito de todas las reuniones es que los miembros de A.A. compartan “su mutua experiencia, fortaleza y esperanza para resolver su problema común y ayudar a otros a recuperarse del alcoholismo”.
Tipos de reuniones
Las reuniones aparecen listadas normalmente como reuniones “abiertas” o “cerradas”.
- Las reuniones abiertas son para todos los que tienen un interés en el programa de recuperación del alcoholismo de Alcohólicos Anónimos. Las personas no alcohólicas pueden asistir a las reuniones abiertas como observadores.
- Las reuniones cerradas son solamente para los miembros de A.A. o para aquellos que tienen un problema con la bebida y un deseo de “dejar de beber”.
En ambos tipos de reuniones se les puede pedir a los participantes que se limiten a hablar de asuntos que tengan que ver con la recuperación del alcoholismo.
Ya sean abiertas o cerradas, las reuniones de los grupos de A.A. son coordinadas por miembros de A.A. que determinan el formato de sus reuniones.
Dónde se hacen las reuniones
Las reuniones de A.A. se hacen en persona, en línea o por teléfono. Los miembros de cada grupo deciden cuándo, dónde y qué tan seguido se van a reunir.
Las reuniones en persona (presenciales) se dan en una variedad de lugares donde se pueda alquilar una sala. Las reuniones se hacen en lugares tales como:
- edificios de oficinas
- iglesias
- centros de tratamiento
- centros recreativos o comunitarios
- edificios destinados a alquilar locales a grupos de recuperación, tales como los clubs
Incluso se puede encontrar reuniones al aire libre, en playas, parques, u otros lugares.
También hay reuniones en línea (cibernéticas) y por teléfono. Se utilizan diversas plataformas dependiendo de lo que prefieran los miembros del grupo. Algunas son reuniones con video en las que los asistentes pueden verse las caras. En otras reuniones en línea, se les pide a todos que mantengan su cámara apagada. Hay otras reuniones, en teleconferencia, donde los que asisten marcan un número telefónico de acceso.
Formatos habituales de las reuniones
Reuniones de discusión. Tanto en reuniones abiertas como cerradas, un miembro de A.A. que presta servicio como “coordinador” o “moderador” abre la reunión utilizando el formato determinado por el grupo, y elige un tema de discusión. El material que se utiliza en muchas reuniones de tema se toma de la literatura de A.A., como Alcohólicos Anónimos (Libro Grande), Doce Pasos y Doce Tradiciones, Como lo ve Bill, Reflexiones Diarias y del AA Grapevine.
Reuniones de orador. Uno o más miembros seleccionados de antemano “comparten” —tal como se describe en el Libro Grande— “cómo éramos, lo que nos acenteció y cómo somos ahora”. Dependiendo de los lineamientos generales (determinados por la “conciencia de grupo”), algunos grupos prefieren que los miembros que hablen tengan cierto tiempo mínimo de sobriedad continua. Las reuniones de orador suelen ser reuniones abiertas.
Reuniones de principiantes. Reuniones de principiantes. Generalmente coordinadas por un miembro del grupo que lleva cierto tiempo de sobriedad, se trata de reuniones pensadas para ayudar a los recién llegados. Las reuniones de principiantes también pueden utilizar el formato de discusión, o enfocarse en el Primer, Segundo o Tercer Pasos. (Una guía para coordinar reuniones de principiantes se puede obtener de la OSG)
Reuniones de Pasos, Tradiciones o del Libro Grande. Ya que los Doce Pasos son la base de la recuperación personal en A.A., muchos grupos dedican una o más reuniones a la semana al estudio de cada Paso sucesivamente; algunos hablan sobre dos o tres Pasos a la vez. Estos mismos formatos pueden aplicarse a las reuniones de grupo sobre el Libro Grande o las Doce Tradiciones. Muchos grupos habitualmente leen en voz alta material pertinente del Libro Grande, o Doce Pasos y Doce Tradiciones al comienzo de la reunión.
Qué sucede en las reuniones
El (la) coordinador(a) abre la reunión con el Preámbulo de A.A. y unas palabras. En algunas reuniones se pide un momento de silencio o se recita la Oración de la Serenidad. El (la) coordinador(a) a menudo pregunta si hay alguna persona que sea nueva en A.A. que quiera presentarse. No es obligatorio identificarse, pero si es su primera reunión, es una buena idea hacerlo. Muchas reuniones comienzan con una lectura del Libro Grande, frecuentemente una parte del Capítulo 5 (“Cómo funciona”), o bien el Capítulo 3 (“Más acerca del alcoholismo”). A veces se lee un enunciado sobre el anonimato en A.A., que explica que es un principio de privacidad valioso tanto para los nuevos como para las personas que llevan tiempo. Muchas reuniones se cierran con un momento de silencio seguido de una oración, o tal vez de la Declaración de la Responsabilidad o algún otro texto de A.A.
Luego de la reunión
Una vez acabada la reunión la gente se junta y conversa y se genera un ambiente de sociabilidad. Es posible que varias personas se presenten y le ofrezcan su ayuda, o que compartan cómo fueron sus experiencias cuando lograron la sobriedad. Si bien muchos miembros disfrutan y aprovechan este momento, es usted quien decide si quiere quedarse y socializar.
Personas que son enviadas a A.A. por programas de juzgados e instituciones de tratamiento
En las reuniones de A.A. se recibe a personas que provienen de programas de juzgados e instituciones de tratamiento. La fortaleza de nuestro programa radica en que el ser miembro de A.A. es un acto voluntario; no obstante, muchos de nosotros asistimos a reuniones inicialmente porque alguien nos presionó a que lo hiciéramos. El contacto continuo con A.A. nos enseñó cuál era la verdadera naturaleza de la enfermedad.
Quién envió a la persona a A.A. no es de nuestra incumbencia. Nos interesa ayudar a las personas que tienen problemas con la bebida. No podemos predecir quién va a recuperarse, ni tenemos la autoridad para decidir de qué manera cualquier otro alcohólico debería procurar la recuperación.
Prueba de asistencia a las reuniones
A veces, una institución que manda a alguien a asistir a reuniones solicita una prueba de asistencia a las mismas. Los grupos cooperan con esto de formas distintas. No hay un procedimiento fijo. La naturaleza y grado de participación del grupo en este proceso depende enteramente del grupo en cuestión.
Algunos grupos, con el consentimiento del miembro potencial, hacen que un miembro de A.A. reconozca la asistencia. Esta prueba puede brindarse en un papel provisto por la entidad que mandó a la persona a la reunión, o bien por algún medio digital si se trata de un grupo en línea. La persona enviada al grupo es responsable de presentar la prueba de asistencia a quien corresponda.
Las pruebas de asistencia a las reuniones no son parte del procedimiento de A.A. Cada grupo es autónomo y tiene el derecho de decidir si ofrece o no pruebas de asistencia a sus reuniones.